Desde su inicio en 2015, esta movilización ha ido creciendo en fuerza y participación. Son cada vez más las personas que salen a las calles de la capital del país para exigir igualdad y el cese de la la violencia de género. Este 2025, CDMX rompió récord de asistencia en marcha del 8M.
Fue en 2020 cuando la protesta alcanzó un punto de inflexión, convirtiéndose en una de las más grandes del país, sin embargo, lo que pasó este año fue simplemente insólito, pues incluyó a madres con sus hijos y contingentes transincluyentes, un reflejo de la unión y la determinación de todos por un futuro más justo.
Con saldo blanco y sin incidentes graves, el pasado 8 de marzo más de 200 mil mujeres caminaron por las principales avenidas de la CDMX para exigir justicia mayor seguridad en el país para niñas, adolescentes y mujeres adultas. El año pasado fueron poco más de 180 mil las manifestantes que dieron vida a la llamada "marea violeta".
Las manifestantes no estuvieron solas: 800 mujeres policías las acompañaron a distancia con cascos, escudos y extintores; también estuvo presente el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), mismo que brindó atención a 73 personas, de las cuales 66 eran civiles y 7 elementos de seguridad.
Señal de unidad, pero también del hartazgo de las mujeres mexicanas, el récord de asistencia de reconoce, pero no se celebra, pues las pancartas y consignas siguen pidiendo a las autoridades y la población en general respeto, apoyo y una vida libre de violencia.
