Las condiciones climáticas adversas que comprometen la seguridad de los vuelos suelen ser la razón número uno del caos en los aeropuertos y por supuesto que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) no es la excepción. Qué pasó este 2 de diciembre y por qué suspendieron operaciones en el aeródromo.
El objetivo es siempre priorizar el bienestar en el transporte aéreo, tanto de los pasajeros como de la tripulación, y aunque cualquier interrupción en el servicio de un aeropuerto es caótico para aerolíneas y pasajeros, las normas son claras.
La mañana de este 2 de diciembre, alrededor de las 6:40 horas, las operaciones en el AICM fueron suspendidas debido a la densa niebla que dificulta la visibilidad en pistas. El aeropuerto se encontraba bajo mínimos meteorológicos y eran preferibles las afectaciones en los horarios de vuelos programados que poner en riesgo a staff y clientes.
Afortunadamente, las condiciones climáticas mejoraron y cerca de las 9:00 horas se reanudaron despegues y aterrizajes. En consecuencias, las autoridades del aeropuerto recomendaron a los viajeros mantenerse atentos a los canales oficiales de las aerolíneas para recibir actualizaciones en tiempo real sobre las operaciones y estatus de sus vuelos.
Al momento, el AICM o Aeropuerto Internacional Benito Juárez Ciudad de México funciona con normalidad, y se espera que a lo largo del día se regulen los horarios de despegue tanto en lo que respecta a vuelos nacionales como en lo referente a viajes internacionales.
