La triste realidad luego de la celebración a la Virgen de Guadalupe en la Basílica de la CDMX es que 8 de cada 10 perritos que acompañaban a sus humanos al festejo terminan en la calle. Perros peregrinos son abandonados en la Basílica de Guadalupe.
Son millones los fieles que acuden año tras año a cantarle las Mañanitas a la “Morenita” los días 11 y 12 de diciembre, el problema es que muchos de ellos salen de casa con sus canes, pero regresan sin ellos. Los lomitos transitan por avenidas concurridas, de gran velocidad, y caminan horas y horas en condiciones cambiantes para, finalmente, ser abandonados.
La contabilización de canes que podrían quedarse en la calle este 2024 está llevándose a cabo en este momento, pero la referencia del 2023 no es nada alentadora: al menos 150 perros abandonados. Mientras tanto, agencias de atención animal, activistas, políticos y el gobierno local se encargan de los perritos con un protocolo médico para esterilizarlos y reubicarlos en lugares seguros.
Proporcionarles agua y comida durante sus trayectos no es suficiente, pues no existen las condiciones para que se desplacen por tramos tan largos y sin cuidados especiales. Se merecen una vida de calidad y no convertirse en perros peregrinos abandonados en la Basílica de Guadalupe.
